Otoño en Asturias,
amanecer húmedo y lluvioso.
Mi corteza de encina retorcida,
de abierta dehesa del suroeste,
vuelve a estar adornada
por un incipiente musgo norteño.
Precio que hay que pagar
por habitar el paraíso.
Expláyese, no se prive, pero use un nombre, aunque sea un pseudónimo. El anonimato nunca es síntoma de buena fe. Para atacarme personalmente elija otra vía.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Expláyese, no se prive, pero use un nombre, aunque sea un pseudónimo. El anonimato nunca es síntoma de buena fe. Para atacarme personalmente elija otra vía.