INHIBICIÓN.-

El Ministerio de Defensa dio, al parecer hace unos meses, una orden para que se enviaran inhibidores al Líbano. Se inhibieron de mandarlos o se demoraron y, en parte, esa inhibición o demora tuvo sus consecuencias fatales.

Así lo reconoció el propio ministro que no se inhibió tampoco a la hora de justificarse diciendo que ningún ejército de los que participan en la misión los tenía, dando una información más que valiosa para que los terroristas se desinhibieran de cometer hechos similares contra los desinhibidos cascos azules de otras nacionalidades.

Alonso siempre ha sido una persona muy desinhibida desde que era Juez para la Democracia. Luego, de Ministro de la cosa de Interior no se inhibió tampoco al adelantar las condenas a los Guardias de Roquetas, los cuales, como se pudo saber después, fueron malos, pero no tan criminales como los describió el responsable de los mismos. En estas cosas, este Gobierno se muestra muy desinhibido por lo general y en otras da muestras de cierta inhibición.

Se inhibe, por ejemplo a la hora de imponer unas condecoraciones correspondientes por perder la vida en un acto de guerra, y lo hace con razón, ya que nuestro ejército está en el Líbano completamente inhibido para la guerra aunque no para morir. Los colores de los distintivos de las medallas, que, según he oído, no tienen repercusión económica, es utilizado por la oposición que, como  en su día no se inhibió de mandar tropas a Irak, ahora quiere que Zapatero reconozca que las tropas enviadas a Afganistán y al Líbano están en misión de guerra, también, aunque más inhibidos que los otros.

Zapatero se inhibió de hacer declaraciones y gestos en los primeros momentos, posiblemente para ceder protagonismo a la Casa Real que, como es ya costumbre, no se inhibe a la hora de dar pésames emotivos y afectuosos al pueblo llano, pero la inhibición de Zapatero fue criticada por el desinhibido Mariano.

Ahora mandan los inhibidores y no se inhiben de proclamarlo a los cuatro vientos obligando a los islamistas a inhibirse de la bomba a distancia y a cambiar de método para conseguir lo mismo. La oposición no se inhibe de pedir explicaciones sobre la seguridad de nuestras tropas, que se den detalles de su vulnerabilidad o no, detalles que, a parte de ilustrar al Parlamento y al pueblo, llegan también a quien no debe.

Esta falta de inhibición, de responsabilidad a la hora de hacer política tratando temas tan delicados como la seguridad, es una muestra más de que todo vale a la hora de la propaganda. La propaganda es eso. Desinhibición a cualquier precio. Y la desinhibición tiene algo que ver con la desvergüenza.

No se inhiban de opinar.

1 comentario :

Anónimo dijo...

A mi de todo esto lo que más gracia me hace es que se empiece una investigacion judicial por ese gran juez Grande Marlaska... es de traca, pero bueno que investigue que tiene experiencia... cerró la investigación del YAK-42 por no haber indicios que permitieran imputar un delito de imprudencia en la contratación de la aeronaveno.