SÍMBOLOS Y CIRCOS
Los símbolos son símbolos. Sólo eso o todo eso, depende de quién los use.
Imagínense que a uno, que no tiene una idea buena, se le ocurriera cagarse en la estatua de Companys o echar una meada en el milenario árbol de Guernica.
Puede que algunos lo consideraran un ejercicio de libertad democrática. Otros, quizá, me pondrían de fascista para arriba.
No seré yo quién haga una loa del actual sistema y de sus símbolos. Pero, de momento, son los legales y los legítimos, al igual que lo son la Ikurriña, el Guernikako Arbolá, la Senyera y Els Segadors.
Si alguien quiere estar fuera del contexto que se salga, que no reciba copas reales y no tendrá que boicotear himnos.
Pero claro, queremos estar en misa y repicando, "tipical spanish" por mucho que a alguno le salgan erupciones.
El himno vilipendiado representa a mucha gente que trata con respeto los hechos diferenciales. Tengan respeto con los demás, al menos el mismo que los demás les tienen.
Podría yo limpiarme el culo con muchas banderas y no lo hago.
Disfruten de sus millonarios héroes balompedistas pero no toquen los cojones a quién no se mete con ustedes.
Y si no jueguen las ligas con el Granollers y el Eibar, así no tendrán esquizofrénicos problemas centralistas, pero claro, pagará menos el Plus y la Sexta.
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6 comentarios :
Veo que apoya la teoría de la esquizofrenia. Hace bien, no creo que haya otra.
Un saludo.
En estos tiempos la cordura está por definir.
Yo, por un lado, considero que alguien que ha pagado una entrada (y cara) a un espectáculo puede abuchear a placer aquellas partes del mismo que le desagraden. Por otra parte, me parece que si vas a ese espectáculo, pagando una entrada (cara) a sabiendas de que incluye partes que no son de tu agrado, resulta un tanto gilipollas quejarte por ello.
Detesto el himno, la bandera, y a la familia real la enviaba a escardar cebollinos al Atlas, pero no habría silbado al himno.
Una, que es educada.
Aborrezco el himno (casi diría que los himnos), eso por un lado; pero también pensé en estas mismas cosas, en la senyera y la ikurriña y eso, cuando escuché a algunos políticos de partidos independentistas o nacionalistas darnos explicaciones muy comprensivas al respecto.
Vamos, que me ha leído el pensamiento (o he sido yo, no sé).
Más claro, agua. Pero habrá quien no lo entienda y quien no lo quiera entender. Luego están los que se hacen los locos y los broncas de siempre.
Durante un pequeño instante de nuestra historía (la de España y los españoles) fuimos una sociedad madura que conscientes de nuestras carencias, sufrimos la dictadura y quisimos vivir en libertad.
La libertad, nos llegó como a un niño un juguete nuevo y jugamos a ser más libres que nadie.
Ahora, demostrado que somos los niños más libres del mundo, vamos a ir “mas pallá” vamos a mostrar que somos tan libres, libres, libres, que vamos a romper el juguete y encerrarnos en pequeñas cárceles genéticas.
A ver quien supera eso
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