- Hombre, Dionisio,  feliz año nuevo...  
 - Que te jodan Paco, que te  jodan. 
 - Vaya hombre, como se nos  pone el señor, encima que le desea uno lo mejor. 
 - Desea lo que te  salga de la asaduría, Paco, pero a mí déjame en paz que no tengo hoy el  coño pa ruidos. 
 - Joder, Dionisio, que  somos amigos de toa la vida, ¿o no?. 
 - Sí, hombre, sí, de toa la  vida te conozco y de toa la vida llevo aguantando tus brasas, Paco, que eres un  pesao y un cantamañanas, aparte de un agarrao y un gañotero, que gastas menos  que Carrillo en catecismos, Paco, y así te va. Así puedes ir felicitando a la  gente con esa cara de gilipollas que llevas. Porque tú eres feliz, Paco, que lo  sé, y no es que a mí me moleste, que no te deseo mal alguno, pero lo tuyo suena  yá a recochineo. 
 - Pero hombre de Dios,  recochineo de qué, Dionisio. Que estás tu mu raro  últimamente.
 - Recochineo, sí, Paco, que  no está el horno pa bollos, que no están los tiempos como pa felicitar el año ni  a María Santísima, Paco. Que el año que viene a ver si podemos pagar la  hipoteca, el seguro agrícola, la luz, el agua, el tabaco..., el tabaco, Paco,  sí, el tabaco, que ya sé que tú no fumas desde hace quince años y andas tocando  los cojones a tol mundo con lo de la salud, el gusto, lo bien que sabe un café y  cómo subes los escalones de cuatro en cuatro, así te descalabres,  hombre...
 - Coño, que te pasas un  poco...
 - Ni me paso ni hostias  que, ahora, un puñetero paquete de tabaco nacional vale más que tol rubio de ese  de los USA y así andamos, tol mundo tirando otra vez de picadura y papel, que  parece que estamos en la postguerra. Pero total, da igual, porque no nos van a  dejar fumar ni en casa después de echar el polvo semanal, cojones, porque el que  no tiene cerca un colegio, tiene un parque o el consultorio del matasanos, así  que na de na. Ni en la puñetera taberna, ni en la calle y ni en el water, como  te descuides. 
 - No sé porque me da a mí  que tol disgusto viene por lo de la fumaera y que me tocó a mí pagar el pato...  ¿No lo habrás dejao y es por eso que estás más arisco que de  costumbre?
 - Pues sí, lo he dejao y no  por la salud, que, total, me la trae bien floja, sino porque supone una hipoteca  más y, aparte del "mono", me entra una mala hostia sólo de pensar que me obligan  a dejar el único vicio que tenía porque a los gobernantes, en vez de preocuparse  de hacernos la vida más fácil se empeñan en hacérnosla más larga de las putadas  que se les ocurren, eso sí, todo por nuestro bien, pues que se vayan a la  mierda, hombre, que yá está bien. Así que dejo de fumar y, por lo menos, se que  pago menos impuestos para que lo gasten to en gilipolleces y en sus menesteres.  La salud me la suda, Paco, que yá tengo una edad y tengo hecho to lo que tenía  que hacer y ya puedo esperar a la de la guadaña con la conciencia tranquila. Yo  la esperaría echando un cigarro pero ni eso me dejan. 
 - Vale, vale, mira,  Dionisio, voy con un poco de prisa, venga majo, a ver si otro día te veo  mejor...
 - Venga, a mamarla por  ahí...
 - Joder, Dionisio, venga,  ADIOS. 
 - Espera, Paco...  
 - Qué...  
 - Que feliz año nuevo,  hombre... 
 - Tu puta madre, Dionisio,  tu puta madre. 
1 comentario :
Dionisio, no te enfades, hombre, que naide te quita de fumar. Sólo te dicen que en algunos sitios y momentos no está bien.
Si sacan ley es porque sin el uso de la fuerza, por obvio que fuera, no lo tendrías en cuenta, ni sabiéndolo. Tu cabreo es la alegría de los (hasta ahora) agredidos por ti.
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