OTRA ENTRADA A FILO DE ESPADA

A filo de espada se gana el bronce en Pekín. Abajo se apellida el heróico espadachín y, en consecuencia, en el dorsal de su chándal se puede leer "Abajo" arriba, en la parte superior, y abajo, en la inferior, "España". "Abajo España", que dirían muchos de buena gana, financiaciones autonómicas mediante, pero, en este caso, no es más que una coincidencia anecdótica. Un azar del lenguaje.
¿Se imaginan que se apellidara Arriba, el encargado de representarnos a golpe de estoque?.
A estoque y corneado mató un toro José Tomás, el torero más suicida de los últimos tiempos, privando seguramente a Gijón de su presencia trágica en la arena de "El Bibio".
Tras colas kilométricas e intempestivas para conseguir entradas, muchos aficionados de ley, y muchos otros de reventa, se quedarán con las ganas. Entre ellos tres personajes emblemáticos de Mieres que salían, sonrientes y orgullosos, a toda página, en un suplemento vacacional de La Voz de Asturias. Personajes emblemáticos en lo negativo más que en lo positivo y sobre, según dicen las malas lenguas, los que cae una evidente sospecha sobre el dudoso destino de las localidades, posíblemente hinchadas en su cotización conforme se acercara el día del festejo. Las carcajadas y la sorna de muchos mierenses al ver el retrato del popular trío no se hizo esperar. Hoy mismo alguien me ha dicho que, al menos, antes, los "quinquis" no alardeaban de serlo e intentaban mantenerse en el anonimato, que es el estado ideal del que delinque, trapichea o anda en malos pasos. Ahora la fama supera a la honra y vale más ser titular, aún engrilletado ante un estrado, que ser desconocido.
Pero bien me temo que la inversión "Tomasista" saldrá menos rentable que la compra de acciones de una compañía de vuelos baratos, tal y como están las cosas y si los remiendos de los cirujanos no lo remedian.
Y es que no hemos cambiado nada desde el siglo XVII hasta nuestras fechas. Las conquistas se hacen a espada, los toreros levantan pasiones a base de acero y sangre y los pícaros abundan en época de crisis. Económica primero y, como secuela lógica, moral también. Y es en estas épocas cuando se aguza el ingenio, para la picaresca y para la creatividad, que las plumas, el lumpen y las espadas siempre han ido de la mano, aún enfrentadas.
Hoy cumple años un gran escritor, Fernando Arrabal, de conocidos éxitos teatrales pero también, que el poder audiovisual es mucho y en esta España de envidias, dada a la injuria compulsiva, casi más que la genial obra, se recuerda masivamente el episodio de aquel programa de Sánchez Dragó, histórico gracias a aquello, en el que el extrovertido dramaturgo se empeñaba, más que ligeramente ajerezado, en disertar y debatir sobre el "Milenarismo" o "mineralismo" o algo parecido, columpiándose sobre una frágil mesa de centro y besando a intelectuales barbados.
Que siga triunfando en otras lides el espadachín, sane pronto el diestro de las cornadas más que buscadas, recobren algo de decencia los pícaros y cumpla muchos más el dramaturgo que, hoy, no está solo en lo de aumentar las edades pues, hace 43 años, en una ciudad industrial de las Germanias, por azares migratorios, nació éste, su humilde servidor.
Se aceptan dádivas bienintencionadas, aunque sean por Facebook.

1 comentario :

Anónimo dijo...

Felicidades Don Filo! Madre mia como caen los años!Xurxo