PUENTE

Hay funerales de estado por un hombre que, a lo mejor, fue buena gente, aunque no tanto buen presidente, ya que empezó gafado con asaltos verdeados a la investidura, y un apellido muy lastrado. Eso sí, siempre me gustó oírle hablar, sobre todo si no era de política, tenía sutil labia y humor del bueno.

Y en este puente también hubo asaltos a la Cibeles, y mucha retención. Puente de ralas manifestaciones, de clase obrera desclasada salvo para celebrar victorias futbolísticas. Pues, para eso, da igual la hora intempestiva y que al día siguiente haya que madrugar, que la liga es la liga y es mayor la conciencia de Club que la de clase.

En Ultramar, a Evo le salen Ibarretxes y le presentan consultas a las bravas. Y el PNV se le pone bravo a nuestro Evo de León, retándole a otro pulso.

Mientras, los cubanos ya tienen Windows (ventanas) aunque selladas a Internet y al Mundo que, las aperturas, hay que hacerlas a pellizcos.

Y habla Anguita por la tele y canta gregoriano y se ofrece a salvar la Izquierda Unida y habla de un republicanismo serio, sin referencias a experiencias fallidas, responsable, ético, pero no se lleva, Califa, no se lleva eso, se lleva el folclore tricolor y las portadas de El Jueves son la consigna.