CALIMERISMO NACIONALISTA. NADIE ME QUIERE, TODO EL MUNDO ME INSULTA, SOY UN INCOMPRENDIDO.

Andan ofendidos, indignados, enfurruñados los del PNV. Con el PSE por sus supuestos insultos tras la actuación de Egibar y luego Urkullu tras lo de Mondragón, el pueblo que no la orquesta. La guinda la puso una dignísima viuda en un homenaje, tardío y a regañadientes, a su marido asesinado cobardemente y despreciado como se desprecia a la mayoría de los asesinados por aquellos lares. El Lehendakari, ni está ni se le espera, a no ser que sea para hablar de consultas y plebiscitos, pero debe andar ofendido, haciendo pucheros como sólo él sabe hacerlos, tras el chaparrón, de una viuda por un lado, y del PSE por el otro. 
Ahora dicen que, seguramente, probablemente, posiblemente, no se "ajunten" para el tema de la investidura. Pero después de que la Cámara Vasca celebrara el homenaje a destiempo, donde se mencionaron las palabras ciertas y oportunas por una mujer serena y firme, en otro lugar se celebró, con el beneplácito de las autoridades, un homenaje a un criminal que murió de muerte "morida", que no "matada", como mueren la mayoría de los asesinos, en la cama.
Y el PSOE debe tomar nota y dejarse de ambigüedades en estos temas pues la sangre de sus militantes lo reclama. 
No me parece trascendental que en el fallido, errático y demencial proceso de paz en el que se embarcó "Z" se llegaran a ofrecer instituciones comunes en Navarra y País Vasco, concesiones políticas al fin y al cabo, tal y como publica, como no, "El Mundo".
Para mí no deja de ser otra muestra del empecinamiento zapateril por llevar a buen puerto una nave que tenía, de inicio, una vía en el casco nada más salir del astillero.
Lo trascendental es que ofrezca un pacto, como parece que va a ser, que excluya el diálogo con la banda.
Dicho diálogo, de producirse, deberá ser al final definitivo de la actividad armada y nunca referido a temas políticos.
Y es que el tocar temas políticos, en un país democrático, con gente que como argumento usa el asesinato, no solo da cierta legitimidad a su actividad sino que además da alas a otros, como el compungido Ibarretxe, para dar rienda suelta a sus delirios.
En otro orden de cosas, El Diario Vasco publica una entrevista con Xabier Aierdi , profesor de Sociología de la UPV, que ofrece hoy en San Sebastián una conferencia titulada Retos socio-políticos que se plantean en la actual situación del País Vasco.
En esta entrevista afirma que "estamos en un mal momento por el final de la tregua. Seguimos instalados en la diferencia entre el conflicto político y el violento. El conflicto político queda hay oscurecido por el violento. Estamos entre identidades que no terminan de reconocerse o ante una forma de identidad inconclusa. Desgraciadamente no ha sido posible articular un vasquismo prepolítico, cultural, identitario, que luego sea articulable en términos más españolistas o nacionalistas vascos. Cada parte intenta poner soluciones sencillas a un problema muy complejo. Y ETA tiene un problema con el reconocimiento de la pluralidad, porque piensa que es algo que es posible resolver creando una homogeneidad política y étnica, pero es imposible".
Un sesudo análisis no exento de razón. Una sociedad dividida, más por los políticos que por los ciudadanos, gran éxito de ETA y su socialización del terror, con distintas visiones de identidad política, étnica y territorial, en la que unos niegan la mayor y otros no dejan de soltar órdagos mientras el terror impera.
A mi entender, abundando en el tema, efectívamente existen varias identidades pero una de ellas, innegable en su condición étnica y cultural, no lo es tanto en su concepción política y territorial, pues ni todo el territorio reclamado es, ni ha sido nunca, exclusívamente vasco ni todo los vascos, en el aspecto étnico me refiero, comparten esa forma de entender la identidad.
Por ello el nacionalismo tacha de antivasco a todo aquel que, siendo incluso de "pura cepa", no cree en la nación vasca pero, eso sí, no dudan en asimilar para sí a los no vascos puros, advenedizos a la idea de Sabino y su posterior desarrollo.
En conclusión, o eres vasco nacionalista o pierdes la condición de vasco y, si no eres vasco pero simpatizas, te conviertes al credo haciéndote vasco converso, pues te damos el título. Y es a ese sector al que se refieren cuando dicen "pueblo vasco" o "las vascas y los vascos". No tengan dudas de que no se refieren, por ejemplo, a Iturgaiz, que es más "euskaldún" que Ibarretxe y mucho menos a Ana Iríbar aunque ésta coíncida en apellido con aquel portero, héroe del franquismo y proetarra en sus ratos libres.
Bueno y yá lo dejo que creo que no está mal para empezar la semana, que luego se me aburren con tanto desvarío.
 

1 comentario :

Anónimo dijo...

He aqui una definición estupenda de los nacionalismos:

http://julianmolina.wordpress.com/2008/04/07/la-mayoria-de-los-vascos-es-idiota/